Sólo las vaquillas de la noche del viernes se resintieron por la tormenta, mientras que el resto de eventos incementaron su público.

Las actividades arrancaron con buen pie desde la tarde del miércoles, alcanzando la mayor presencia de público en el Encierro por el Campo, el primer encierro, y las actuaciones musicales de la noche del sábado. Las novedades de la anterior legislatura se consolidaron en el programa, respondiendo el público con satisfacción a las novedades en la Quedada de Peñas, la instalación de la carpa en el Ferial y el segundo toro del Encierro Campero. El Alcalde, Rafael Esteban, ha resaltado el papel de “las peñas, los colaboradores del encierro por el campo, los pregoneros, Protección Civil, Policía Local, los trabajadores municipales, la charanga Patxaran, los concejales y concejalas y, en especial el trabajo de la Comisión de Fiestas”

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Ni el intenso calor de los primeros días ni la tormenta sufrida en la madrugada del viernes consiguió amilanar a los marchamaleros y miles de visitantes que esta semana han acudido en masa a Marchamalo para disfrutar de los cuatro intensos días de actividades propuestos por el consistorio gallardo por su Feria Taurina de verano. Pese a ello se ha obtenido un magnífico resultado de participación en prácticamente todas las actividades, desde las infantiles hasta los festejos taurinos de la plaza de Toreos, que incrementaron sensiblemente su aforo, aunque lejos de los eventos populares y verbenas.

Desde el mismo miércoles por la tarde arrancó la actividad festiva, gracias las actividades que fueron novedad la pasada legislatura y que en estas fiestas se han consolidado con más y mejor respuesta por parte del público. La primera fue el Pregón Infantil, el encierro de carretones, y una prefiesta con disco-móvil. Y ya el jueves, como antesala el inicio oficial a los festejos, se visualizó de nuevo con la plena implicación de las peñas en su tercera Quedada de Peñas, esta vez en el Parque de Ferias con charanga, barrilada, aperitivos y comida, además de un cañón de espuma para los niños. Una iniciativa que cada año suma más adeptos y que animó las horas previas al Pregón y Chupinazo ofrecido por la Peña ‘Disidentes’, colectivo que celebraba además su décimo aniversario.

Cientos de marchamaleros les acompañaron en la puesta de largo de las fiestas, iniciadas por el Alcalde, Rafael Esteban, trasmitiendo a sus convecinos los mejores deseos de confraternización y acogimiento para los visitantes, además de una llamada a la máxima precaución que tuvo su reflejo en la ausencia de incidentes de gravedad en todo el fin de semana, incluidos los eventos taurinos.

Los grandes eventos de la semana fueron, sin lugar a dudas, los festejos populares ofrecidos por el consistorio, en especial los encierros celebrados en el recorrido de casi un kilómetro con el que cuenta Marchamalo en su Parque de Ferias, y el encierro campero, celebrado durante la tarde del pasado viernes con una presencia apabullante de público y jinetes a caballo que acudieron en masa hasta el paraje de la Media Luna, este año con la agradable sorpresa para el aficionado de la suelta de un segundo toro, no prevista inicialmente.

Los aficionados taurinos también acudieron en gran número a la Plaza de Toros para presenciar la suelta de vaquillas del sábado, ya que la tormenta del viernes sacó a los espectadores de la plaza, aunque aguantaron un puñado de atrevidos a los que no frenó la fuerte lluvia. La entrada mejoró sensiblemente en la novillada picada y el festejo de rejones, ambos por encima de la media entrada, con diestros muy vinculados a Guadalajara, los novilleros Fernando Lomeña, Juan de Castilla y Adrián Henche, y los jinetes Alfonso López Bayo y Óscar Mota.

De ambos espectáculos la novillada fue el menos espectacular, aunque los tres novilleros lograron dejar con buen sabor de boca al público con una oreja para cada uno en el segundo toro de la tarde. Actuación destacada la del colombiano Juan de Castilla, formado en el CEART de Guadalajara y elegante en su lidia. El festejo de rejones estuvo más completo, con una oreja para el chiloechano López Bayo y una gran actuación de Óscar Mota, que logró transmitir al público su tremendo entusiasmo logrando cortar dos orejas y salir a hombros por la puerta del coso marchamalero.

NOCHES LARGAS CON BUENA TEMPERATURA

Las temperaturas templadas registradas durante las noches de fiesta animaron especialmente a los visitantes durante la noche del sábado, lo que ayudó a que el Parque de Ferias marchamalero ofreciera un aspecto realmente festivo durante las cinco noches en las que albergó la actividad propia de estos días. Más aún, Marchamalo acogió miles de visitantes durante el fin de semana, que se dejaron notar su presencia tanto en la zona de los bares y tómbolas como en las atracciones y las peñas, con un ambiente especialmente multitudinario durante las actuaciones musicales nocturnas, en las que las orquestas Evasión, La Viva y el Grupo Tera animaron una zona de conciertos casi siempre repleta y que no padeció los efectos de la tormenta del viernes gracias a la instalación de una carpa.

Las actuaciones final durante el fin de semana de las disco-móvil Euforia e Ibiza Sound, mantuvieron la diversión entre centenares de jóvenes hasta entrada primeras horas de la mañana, culminando la Feria con una tranquila jornada de domingo en la que el Parque de Ferias volvió a lucir una fantástica actividad.

Lo mejor de la Feria Taurina fue la práctica ausencia de incidentes, sin cogidas reseñables más allá de algún herido leve en la primera tarde de encierro, y ello a pesar de la elevada asistencia de público durante todo el ciclo de la Feria Taurina marchamalera.

24/08/2015