La celebración del décimo aniversario de la desanexión efectiva de la población de Marchamalo con respecto de la ciudad de Guadalajara en 2009, después de 26 años unida a la capital de la provincia, se llevó a cabo en un emotivo acto protocolario de homenaje a los que fueron los principales protagonistas de un largo proceso administrativo que se prolongó durante toda la década de los noventa (álbum de la derecha).
La presencia de todos ellos, incluidos los que fueran alcaldes de Marchamalo y Guadalajara durante el proceso, Juan Armando Monge y José María Bris, fue aprovechada para llevar a cabo el estreno del documental más completo que existe sobre la localidad en formato audiovisual.
Bajo el título de Marchamalo, cruce de caminos y precedido por la proyección del spot del mismo, se presentó este medio metraje cercano a los 35 minutos de duración, producido por encargo del Ayuntamiento de Marchamalo y dirigido por el gallardo Santiago Isidro, profesional de la imagen galardonado en 2005 con el premio Goya de reportaje social, Premio Nacional que concede cada dos años desde 1985 la Asociación de Fotógrafos Profesionales de Zaragoza y Provincia.
El documento, para cuya elaboración fueron necesarios cerca de dos años de trabajo y 40 horas de grabación, ofrece un ameno recorrido a través del presente, pasado y futuro de la localidad campiñera.
Dividido en diez capítulos, el metraje del documental recorre los orígenes romanos y árabes de Marchamalo, sus tradiciones, el desarrollo de su incipiente agricultura durante el Medievo, el auge de su industria, primero manufacturera y más tarde ligada al desarrollo del Polígono Industrial del Henares, pasa a centrarse en la variedad de servicios de los que actualmente dispone el municipio al alcance de sus vecinos para, después, hacer una breve proyección al futuro de la localidad a medio plazo.
De los múltiples colaboradores que participaron para hacer realidad este trabajo, entre ellos un buen puñado de marchamaleros vinculados al mundo de la imagen y solícitos voluntarios, destacó el papel de José Hernández como director de fotografía, Álvaro García como guionista, Francisco Monge en la fotografía fija y Marcelino Casero en el control de la cabeza caliente, así como Juan Enrique Ablanque, Cronista Oficial del municipio en la supervisión del rigor histórico del contenido del mismo.
DISFRUTA AQUÍ DEL SPOT DEL DOCUMENTAL
