Desde las 00:00 horas del miércoles 22 de julio, y después de su aprobación en el Consejo de Gobierno de la Junta de Comunidades de Castill-La Mancha celebrado esta mañana en el Palacio de Fuensalida de Toledo, el uso de la mascarilla es obligatorio en toda Castilla-La Mancha.

El uso obligatorio de la mascarilla se aplica a partir de los 6 años de edad -para los menores de 6 años es una recomendación- y se refiere a su uso en la vía pública, espacios al aire libre y a cualquier espacio cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público, aunque se pueda mantener la distancia de seguridad de, al menos, 1,5 metros.

Están exentos de esta obligación las personas que presenten algún tipo de enfermedad o dificultad respiratoria que pueda verse agravada por el uso de mascarilla; quienes, por su situación de discapacidad o dependencia, presenten alteraciones de conducta que hagan inviable su utilización; al realizar ejercicio de deporte individual y colectivo; donde haya causa de fuerza mayor o situación de necesidad o cuando, por la propia naturaleza de las actividades, el uso de la mascarilla resulte incompatible -en bares, restaurantes y terrazas, durante la ingesta de bebidas y alimentos; y en las piscinas públicas o privadas de uso comunitario y en zonas de baño naturales, durante el baño y mientras se permanezca en un espacio determinado, siempre que se respete la distancia de seguridad interpersonal entre los usuarios, mientras que para los desplazamientos y paseos será obligatorio el uso de mascarilla-.

En caso de incumplimiento, la nuevo normativa contempla sanciones de hasta 100 euros que podrá imponer la Policía Local y los cuerpos de seguridad del Estado.

CÓMO USAR LA MASCARILLA

A la hora de utilizar la mascarilla, es importante seguir las recomendaciones sanitarias para no generar situaciones de riesgo de contagio, por lo que se recomienda lavarse las manos antes de colocarla, coger la mascarilla por las gomas, colocarla sobre la cara con la zona azul hacia fuera y el alambre arriba -en el caso de mascarillas quirúrgicas-; cubrir nariz, boca y barbilla y evitar tocarla mientras se lleva puesta. Para retirarla, hay que cogerla por las gomas sin tocar la mascarilla, desecharla en un cubo con tapa y lavarse las manos.