Los profesionales de Enfermería Familiar y Comunitaria están liderando el desarrollo de este estudio con el apoyo del personal administrativo y otros profesionales de los distintos centros de Atención Primaria. En Guadalajara son quince los centros que participan en la realización de este estudio, uno de ellos el Centro de Salud ‘La Campiña’ de Marchamalo, con el que se pretende conocer la situación actual de la epidemia por COVID-19 para establecer mejores medidas de control. En total se va a evaluar a 1.125 personas de nuestra provincia que no han enfermado en estos últimos dos meses, 65 de ellas de Marchamalo.
Un total de 1.152 personas han sido seleccionadas en la provincia de Guadalajara para participar en el Estudio Nacional de Sero-prevalencia Epidemiológica de la infección por SARS_COV-2, estudio promovido por el Ministerio de Sanidad y el Instituto de Salud Carlos III, en colaboración con las comunidades autónomas. Estas personas han empezado ya a acudir a una quincena de centros de salud que participan en dicho estudio en nuestra provincia.
Uno de ellos es el Centro de Salud ‘La Campiña’ de Marchamalo, donde se realizará el estudio a 65 personas con las que se contacta previamente para que den su consentimiento. También participan los centros de salud de El Alamín, El Balconcillo, Guadalajara-Sur y Cervantes, en la capital alcarreña, junto a los centros de salud y consultorios de Azuqueca de Henares, Cogolludo, El Casar, Mondéjar, Sigüenza, Alcocer, Alovera, Caraquiz, Chiloeches y Villanueva de la Torre. Dicho estudio se desarrolla durante dos semanas. Se ha citado a un total de 357 vecinos y vecinas en los cuatro centros de salud participantes en Guadalajara capital y 795 en la provincia, agrupando el mayor número de estudios previstos Azuqueca de Henares, con un total de 178, seguido de El Casar con 70 estudios, 66 en Mondéjar, 65 tanto en Villanueva de la Torre como en Marchamalo, o los 60 previstos en Chiloeches y en Alovera.
A principios de esta semana se comenzó a contactar e invitar a la participación a los miembros de los hogares que se han seleccionado de manera aleatoria. Con una notable participación, están acudiendo a los distintos centros de salud para participar en este estudio que están liderando los profesionales de Enfermería de Familia, junto con el personal administrativo y otros profesionales de los centros de Atención Primaria. Los participantes acuden a tres visitas de seguimiento y en cada una de éstas, el personal de Enfermería les realiza un test rápido de anticuerpos a través de una muestra de sangre obtenida mediante un pequeño pinchazo en el dedo.
La prueba proporciona información para saber si la persona ha estado en contacto con el virus, es decir, si tiene “defensas” frente al coronavirus que produce la enfermedad Covid-19. Es importante tener en cuenta que este test no diagnostica la enfermedad, ya que haber tenido contacto con el coronavirus no significa estar enfermo.
Posteriormente, y siempre que el participante esté de acuerdo, se le realiza una extracción sanguínea para su posterior análisis en el Centro Nacional de Microbiología (CNM) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) con el fin de medir la existencia de anticuerpos. Esta extracción no tiene más riesgos que las molestias propias de análisis rutinario de sangre. Además, se le realizará una breve encuesta que contiene una serie de preguntas que ayudarán a conocer su situación de salud y si tiene síntomas de la enfermedad por coronavirus, y se le proporcionará información útil sanitaria, además de aclararle posibles dudas. A cada participante se le entregará la información con el resultado del test, así como recomendaciones para protegerse y proteger al resto de las personas, así como recomendaciones a tener en cuenta en caso de presentar sintomatología.
En Castilla-La Mancha, se va a contactar e invitar a participar en el estudio a un total de 6.700 personas que se repartirán entre un total de 98 centros de Atención Primaria. El papel que desempeñan los profesionales de enfermería resulta fundamental en este estudio, que va a permitir conocer la situación actual de la epidemia y contribuir así a adoptar mejores medidas de control.