El Alcalde de Marchamalo, Rafael Esteban, ha recibido hoy a una amplia delegación de personal técnico del Port de Tarragona y sus representantes políticos, encabezados por su nuevo presidente, Saül Garreta, quienes han visitado el Ayuntamiento de Marchamalo y los terrenos donde se construirá próximamente la nueva terminal intermodal en la que la autoridad portuaria operará con trenes de mercancías de hasta 750 metros de longitud en la Ciudad del Transporte. El proceso de licitación de la obra se encuentra en su fase final, con seis ofertas sobre la mesa, estando previsto el inicio de las obras para septiembre.
Una amplia delegación con personal técnico y representación política del Port de Tarragona ha visitado hoy Marchamalo con el fin de conocer de primera mano la ubicación donde se levantará próximamente la nueva terminal intermodal de transporte de mercancías operada por la autoridad portuaria en término municipal de Marchamalo. Encabezada por el nuevo presidente del Port de Tarragona, Saül Garreta, se han reunido en el Ayuntamiento de Marchamalo con el alcalde, Rafael Esteban, y varios concejales de actual equipo de Gobierno en funciones, a quienes han trasladado los últimos avances sobre el proyecto y sus previsiones a corto y medio plazo.
Garreta ha informado a los responsables gallardos de que el proceso de licitación de esta segunda fase de las obras de construcción del nuevo puerto seco está en su recta final, surgiendo de la misma la empresa adjudicataria de entre las seis ofertas presentadas, con el objetivo de que los trabajos, valorados en unos 22 millones de euros, puedan comenzar sobre el terreno durante el próximo mes de septiembre. El plazo de ejecución de las obras está estimado en un año, por lo que se espera que la terminal intermodal esté operando con trenes de mercancías llegadas por el mar Mediterráneo a primeros de 2024. El objetivo, generar un nuevo enclave estratégico para los nuevos tráficos de mercancías desde y hasta el centro de la península que llegan al puerto de Tarragona, en el que entran y desde el que salen a otros puntos de toda la cuenca Mediterránea, de Oriente Medio y de Asia.
Después la comitiva ha visitado los terrenos donde se levantará esta terminal intermodal, una superficie de 150.000 m2 junto a la vía férrea que une Madrid con Barcelona que ya han sido objeto de una primera fase de obras con nivelación de terrenos, instalación de saneamiento y vallado perimetral por valor de 5 millones de euros.
DETALLES DE LA SEGUNDA FASE DE LAS OBRAS
Las principales actuaciones que se llevarán a cabo a partir de septiembre serán las conexiones en dos puntos a la red ferroviaria de ADIF, la ejecución de la superestructura de las vías, la instalación de los elementos de seguridad y comunicación, la pavimentación de la plataforma, la ejecución de las estructuras y la electrificación y catenaria correspondiente.
Más en concreto, se instalarán de 19 desvíos que permitirán todos los movimientos y maniobras, la construcción de 3 vías de carga y descarga para trenes de hasta 750 metros de longitud y 3 vías de expedición y recepción. Por otra parte, la pavimentación de 100.000 m2 por la zona de operativa y almacenamiento de mercancías y la construcción de un edificio de servicios de 100 m2. En total se construirán 7.750 metros de vía de ancho ibérico.
Un espacio multifuncional, especializado en funciones logísticas, distribución y transformación con todos los equipos y dotaciones como complemento a la actividad principal, que se prevé que esté operativa en 2024.
Sobre el terreno han estado presentes también los responsables de la empresa urbanizadora del proyecto Puerta Centro – Ciudad del Transporte, con Juan José Cercadillo a la cabeza, cuyo trabajo de urbanización del sector se encuentra cerca de concluir, ejecutándose ya el nuevo puente sobre la carretera CM-101 y su conexión norte con este nuevo sector industrial.
La PortTarragona Terminal Guadalajara-Marchamalo contará con una conexión directa con La Boella, su terminal gemela situada en el interior del Puerto de Tarragona, reforzando la unión, la conexión y la capacidad del Corredor de Henares con el Corredor del Mediterráneo, favoreciendo la circulación de mercancías entre la Península y el resto del continente europeo mediante estas dos plataformas logísticas que el Puerto de Tarragona operará de forma coordinada.