La piscina municipal de verano de Marchamalo abrirá sus puertas el último fin de semana de junio con reducción de aforo al 56% de su capacidad y división de la paradera en parcelas, si bien las normas de prevención frente a la COVID-19 serán menos estrictas que el año pasado, dada la positiva evolución de la pandemia y el elevado ritmo de vacunación.
Las normas establecidas serán algo más restrictivas que lo que que permite la actual normativa (hasta un 75% de aforo en este tipo de instalaciones), pero con ello se pretende garantizar el correcto distanciamiento entre diferentes grupos de personas y el rastreo ante posibles casos de contagios, motivo por el cual se pedirá un registro a las personas que accedan a la instalación y se establecerá una distribución por parcelas numeradas con un máximo de ocupación de 10 personas. Habrá un total de 56 parcelas, y el aforo máximo de la piscina será de 560 personas, mientras que el uso de la mascarilla estará supeditado a la normativa vigente en cada momento.
No obstante, el cambio de normas permitirá retomar la apertura en horario ininterrumipudo, todos los días de 12.00 a 21.00 horas, lo que supone ampliar una hora más el horario de 2019, además de unificar los precios de acceso a la instalación en solo dos tipos de entrada, una general con un coste de 2,75 € y una infantil por 1,75 € (hasta 12 años), precios sensiblemente más baratos que el año pasado y equivalentes al coste por entrada de un abono de 20 días.
Eso sí, esta temporada tampoco será posible utilizar los abonos de baños adquiridos en 2019, puesto que las condiciones de prestación de servicios en la piscina siguen sin ser las mismas que antes de la pandemia, lo que supone costes añadidos.
Para conocer si existe espacio disponible en la instalación, puedes contactar con la piscina llamando al teléfono 683 671 644 en horario de apertura.
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