La jornada comenzó con un almuerzo y el alzado del Mayo, esta vez sin contratiempos, para continuar después con un colorido pasacalles que precedió a más de una decena de actuaciones en directo con comida popular en la Cubierta.

La Fiesta del Folclore Provincial del Ayuntamiento de Marchamalo se superó ayer en su segunda edición con una completísima jornada de actividades y actuaciones musicales con un mismo hilo conductor, la tradición cultural de Guadalajara. Una quincena de botargas y vaquillones, además de una decena de grupos de danzantes, rondas, dulzaineros y jotas procedentes de todos los puntos de la provincia fueron los protagonistas en una jornada entrañable que arrancó por la mañana con un almuerzo popular, la repetición del alzado del Mayo, el pasacalles desde la Plaza Mayor y diversas actuaciones musicales durante toda la jornada en la Cubierta del Parque de Ferias, donde se entregó el primer Premio Provincial de Folclore de Guadalajara a la Escuela de Folclore Provincial, todo ello con el patrocinio de la Diputación de Guadalajara.

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Día para el recuerdo el de ayer en Marchamalo con motivo de la celebración de la segunda edición de la Fiesta del Folclore Provincial, promovida el año pasado desde el Consistorio gallardo con el fin de poder reunir diferentes manifestaciones culturales ancestrales de toda la provincia de Guadalajara en un día de celebración y reivindicación de nuestro folclore popular. Jornada a la que se sumó un nuevo intento del tradicional alzado del Mayo, que no pudo culminarse la noche del pasado día 30 de abril, pero que, en esta ocasión, se realizó en el primer intento y sin percances con un ambiente festivo en una soleada y cálida mañana primaveral.

Fue por este motivo por el cual la convocatoria inicialmente prevista se adelantó a las 10.30 horas, momento en el que comenzó el reparto de un almuerzo compuesto por chorizo, huevos y patatas con el que coger fuerzas de cara a la larga jornada que se venía por delante. Una vez levantado el Mayo con éxito en el lugar habitual de la Plaza Mayor, se dio por iniciado el pasacalles que llevó a la variopinta comitiva, compuesta por una quincena de botargas y vaquillones llegados desde múltiples rincones de la provincia y una decena de grupos folclóricos, encabezados por los gigantes gallardos, hasta la Cubierta del Parque de Ferias.

En este recinto, aprovechando las mejoras introducidas recientemente en su perímetro y en el interior, se desarrolló con inmejorables condiciones el resto de la jornada, en un ambiente de celebración y hermanamiento que se dejó sentir entre el público y en el escenario desde que salió la primera de las botargas, la de Aleas, a la que siguieron otros quince personajes procedentes de distintos puntos de la provincia, caso de las botargas de Beleña de Sorbe, Fuencemillán, Humanes, Majaelrayo, Montarrón, Razbona, Retiendas, Romanones; la botarga de casados de Robledillo de Mohernando; la botarga y bufón de Palacio de Mohernando; la vaquilla de Gajanejos; el diablo, Vaquillas y Mascaritas de Luzaga; los vaquillones de Robledillo de Mohernando; el Tío Alhiguí y las Mascaritas de Salmerón; y la botarga y danzantes de Valdenuño Fernández, que cerraron el encuentro con una demostración de su baile sobre el escenario. Todos ellos recibieron una placa de agradecimiento de manos del alcalde, Rafael Esteban, y distintos concejales del Ayuntamiento de Marchamalo.

El espectáculo continuó inmediatamente con otras expresiones de la cultura popular de nuestra provincia, centradas en diferentes expresiones música y danza populares. Grupos folclóricos de Guadalajara que actuaron de manera continuada sobre el escenario marchamalero, empezando por los Dulzaineros Calaveras, la Ronda de Azuqueca de Henares, el Grupo Albazor de Albalate de Zorita, la Ronda Raíces de Chiloeches, el grupo de jotas y la ronda de la Escuela de Folclore de la Diputación de Guadalajara, los y las Danzantes de La Huerce, la Ronda de Horche, el Grupo Amigos del Acordeón de Guadalajara, el Grupo de Canto de la Asociación de Amigos de la Biblioteca Provincial, y, como broche final, la actuación de los Gaiteros Mirasierra.

A las actuaciones de los grupos folk de la provincia de Guadalajara le siguió una comida popular con migas de pastor y huevos fritos ofrecida por la organización, con cerca de 500 raciones repartidas, siendo después el turno para la entrega de los premios del Concurso de Carrozas y Comparsas del desfile de las Fiestas Patronales, y la entrega del primer Premio de Folclore Provincia de Guadalajara, que recogieron los representantes de la Escuela de Folclore de Guadalajara, con José Antonio Alonso a la cabeza, de las manos del alcalde, Rafael Esteban, y la diputada de Cultura, Rosa María García Ruiz. Un merecido reconocimiento a sus 40 años en activo al que se sumó también otro adicional a la Escuela de Artesanía, presente en la jornada con demostraciones de sus distintos talleres de artesanía.

El alcalde de Marchamalo, Rafael Esteban, quiso agradecer a todas las personas participantes y presentes el haber hecho posible “otra edición de una fiesta que queremos que sea fija en el calendario festivo de nuestro pueblo cada domingo previo a la celebración de San Isidro, juntando en este escenario de nuestra Cubierta toda expresión del folclore popular de la provincia de Guadalajara, convirtiéndola en referente para una forma de expresión cultural que debemos conservar, porque nos recuerda quienes somos y de dónde venimos, acercándonos a los ancestros que nos precedieron a través de estas creaciones culturales tan singulares que tenemos”.

El broche final a esta completa jornada lo puso de manera inmejorable el internacionalmente reconocido grupo folk soriano ‘Nuevo Mester de Juglaría’, que ofreció un espectáculo musical de gran calidad que arrancó los enérgicos aplausos del público desplazado a Marchamalo desde múltiples rincones de la provincia.