Solicitan a la MAS que establezca distintas tarifas de agua según se trate de consumo doméstico o industrial, y a la Junta un Plan de Empleo
En la primera se solicita a la MAS que se establezcan diferentes tarifas y penalizaciones en el recuento del consumo de agua según se trate de consumo doméstico o industrial, y en la segunda, un Plan de Empleo para Marchamalo en el que el Ayuntamiento está dispuesto a sportar 50.000 €. También se aprobaron nuevas tarifas y descuentos en el servicio de la Escuela Infantil de Marchamalo, flexibilizándolas.
Todos los puntos del orden del día del pleno celebrado esta mañana por el Ayuntamiento de Marchamalo han salido adelante, prácticamente todas con la unanimidad de los tres grupos políticos, a excepción de dos. Las mociones presentadas por el grupo socialista, en las que se solicita a la Junta un Plan de Empleo para Marchamalo y a la Mancomunidad de Aguas del Sorbe (MAS) tarifas diferentes para los consumos de agua residenciales e industriales, fueron aprobadas con los votos de los ediles del PSOE e IU, pero con el voto en contra de los representantes del Partido Popular.
La que se debatió en primer lugar fue la referente a la política de facturación y penalizaciones en el consumo de agua que desde la MAS se impone a los municipios a los que suministra este bien de primera necesidad. Hasta el momento, la MAS cobra una penalización por el consumo de agua potable a los municipios a partir de los 350 m3 por habitante y mes, es decir, una tarifación que no distingue entre los consumos realizados en el ámbito doméstico y en el industrial, provocando que municipios como Marchamalo, en los que el peso de la industria con respecto a la población es elevado, estén pagando un recargo disparatado por su consumo de agua pese a que sus vecinos no la desperdician.
A esta problemática se suman dos factores. Por un lado, el acuerdo de desanexión de Guadalajara, en el que la cantidad a pagar al consistorio de la capital por el consumo de la parte gallarda del Polígono Industrial del Henares, cuyo abastecimiento se realiza desde Guadalajara, es el equivalente al 10% del consumo total de la ciudad. Un acuerdo que, 14 años después, y después del crecimiento exponencial de Guadalajara, supone un gravamen excesivo para Marchamalo. Por otro lado, la intención de la MAS de incrementar la factura del agua que pasa a los municipios a los que abastece en un 46% a partir del año que viene. Un incremento que vendrá dado por la ejecución de las obras de la conexión con Alcorlo y la tercera conducción desde la potabilizadora de Mohernando a Alcalá de Henares, así como de la intención de rebajar el límite a partir del cual se sanciona con recargos desde los 350 m3 actuales a los 300 m3.
Todos estos factores provocarán una situación en la que «está claro que la MAS no está actuando con justicia y sí perjudicando claramente a los marchamaleros, al penalizar más a los vecinos de algunos municipios simplemente porque el peso de su industria con respecto a su población es mayor», como recalcó durante la sesión el Alcalde de Marchamalo, Rafael Esteban. En palabras del portavoz del PSOE, Manuel Andradas, con su negativa a solicitar una tarifación diferenciada, a los que se están oponiendo los concejales del PP es «a que a los marchamaleros se les trate justamente, porque no desperdician agua».